Preparados para seguir informandonos sobre la autoestima?
Cuando estamos ocupados en mantener una autoestima adecuada en nuestros hijos, un punto muy importante es cómo le hablamos.
Por fortuna, el castellano tiene un vocabulario muy rico en matices. Entre las palabras que debemos tener en cuenta es el verbo SER, muy diferente al COMPORTARSE.
Siempre lo explico de la misma forma, yo puedo SER alta, baja, rubia o morena, que por más que me tiña de rubia, seré morena, porque es algo intrínseco a mí, por el contrario, COMPORTARSE es una elección y es fácilmente modificable.
Cuando escucho a madres (y sobre todo abuelas), decir: «es que es muy malo», yo me pongo las manos en la cabeza, porque además, LOS NIÑOS SUELEN ESTAR DELANTE!!!, sea a quien sea y esté donde esté, yo contesto lo más rapidamente posible, para minimizar el impacto en el niño y para que el adulto de turno se dé cuenta que ha metido la pata hasta el fondo y digo: «no mujer, fulanito ES bueno, lo que pasa es que ALGUNAS VECES, SE PORTARÁ REGULAR».
En primer lugar, juzgar los comportamientos de las personas delante de otras es una falta de respeto, también si es un menor, pero aún peor, cuando los valoramos y los etiquetamos de esta manera, porque si el niño se cree que ES malo, cumplirá el rol.
Imaginaros que a vosotros como adultos, os dicen contínuamente que sois muy guapos, supongo que os lo terminaréis creyendo, no? e ireis por la vida con esa seguridad, pues con los niños igual…o peor, porque la mayoria de las veces lo dicen personas significativas para ellos.
En cambio, si vemos que nuestros pequeños hacen algo que no nos gusta, por ejemplo, pintar una pared, podemos decirle «fulanito, no me puedo creer que hayas pintado la pared!, CON LO BUENO QUE ERES!!!, este comportamiento no te pega!!!» y así Fulanito, aunque sonría, vivirá una discrepancia entre lo que ha hecho y su supuesto rol de bueno.
En muchas de las valoraciones que hago a menores, se autodenominan como MALOS, les pregunto por qué y me contestan «porque hago muchas trastadas»…no os da pena?, ese es el resultado de cómo les hablamos y por consiguiente, de una autoestima baja, fuente de muchos conflictos. En ese momento les aclaro » Estoy segura que no eres malo, sino un BUENO que se equivoca con frecuencia en su comportamiento y eso se arregla».
Habladle en positivo, a la larga, lo notaréis.